viernes, octubre 22, 2010

Basta!



Uno más y van… ¿Y Julio López dónde está?

Basta! Pero no basta al estilo de 678 que pretende que ciertos monstruos sean sucesos beneficiosos para algunos y maquiavélicamente forjado por otros, símil a las gobernaciones de décadas atrás. ¿Cómo pueden evocar “juicio y castigo” para las mismas bestias que no hacen más que alimentar?

Patota sindical, burocracia cínica. Movimientos de base en pie de lucha, armada como toda lucha… donde las dagas no salen a relucir por parte de los manifestantes, son impulsadas por manos entrenadas, funcionales a los buenos fines de personas empaquetadas que pasaron de ser parias a pederosos empresarios que lucran con la miseria, siempre ajena, y ahora de nuevo sindical. Como tantas veces vimos, ejem! Cierto que decimos que no vimos, que solo son historias en libros de historia, con Hércules vivientes que no dejan de sonreir de cotê a sabiendas que serán los heroes o antihéroes, flor de personajes, centrales, total ya no importa la bandera.

Paraguas de impunidad que alejan de las salpicaduras de mierda que generan los avalan. Viajes de lujo los instruyen. Ambigüedades inexplicables, inentendibles.

Basta! De mentir, de figurar cual cabeza de turcos que no saben a quién pero se prestan, nos prestamos, a la mentira generalizada. A la hipocresía.

Sociedad argentina, con sangre escribimos nuestra historia. Sepamos, al menos, por qué vertimos la sangre. Que reluzcan las navajas con sentido, con verdad. No sigamos siendo funcionales y serviles a intereses tan marcados. Levantaos! Pero con razón. Con motivo, con convicciones propias, no instauradas.

Y no soy yo quién deba decir ciertas verdades, pero si quien diga que no podemos seguirnos fanatizando nuestro accionar al son del tambor que más leguas cubra, que más suene. Pensar es difícil, lo sé. Reflexión: acción, reacción, repercusión.
Lo que duele no son las balas, sino su velocidad y mata. A morir pues! Sustanciemos la materia con pechos henchidos prontos a recibirlas a todas con risa en los labios. Claro que la risa surgirá de sentirse libre, de sentirse fiel, de saberse motivados por certezas, no por cuestiones que se olvidarán tan pronto como pase de canal.

Levantarse y resistir.

Julio jamás fue nombrado, pasó a ser un nefasto desaparecido más. Mariano será uno más, os lo digo yo. Tomala vos, dámela a mi, la cuestión tan documentada no deja de lucir bien para quien enuncie el conflicto. Siempre habrá una quimera para los belerofontes. Es inevitable. También podría serlo el entenderlo así y dudar, simplemente germinarnos una pequeña y ultra mega archi peligrosa semilla de incertidumbre. Quizá científica, quizá de sentido común, quizá de perejiles acostumbrados a ser picados en cada cena. ¡Porcina cena!

Saltemos de la parrilla para ofrendar un ramo de hortigas a nuestros asadores. Bonitos ejemplos nos orientan, no sería hora de dejar de tomar todo y aprehender lo que, por una bendita vez, nos sea provechoso. ¿No será hora de decir: Basta!?

Ok, Basta!

F.-